Lula Acusa a Ricos de Hipocresía y Pide Más Voz para Países del Sur Global y Pueblos Indígenas

247 - El presidente Luiz Inácio Lula da Silva criticó a los países ricos este martes (24) y defendió los derechos de los pueblos indígenas y de los países del sur global como uno de los principales caminos para avanzar en los objetivos de desarrollo sostenible en el mundo.

“La falsa oposición entre Estado y mercado fue abandonada por las naciones desarrolladas, que han vuelto a practicar políticas industriales activas y una fuerte regulación de la economía doméstica”, dijo en su discurso en la apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

El jefe de Estado brasileño mencionó al continente africano y también citó a Cuba para enfatizar la necesidad de aumentar la representación de las naciones con menos recursos en la ONU.

“Los países africanos toman préstamos a tasas hasta ocho veces más altas que Alemania y cuatro veces más altas que Estados Unidos. Es un Plan Marshall a la inversa, en el que los más pobres financian a los más ricos. Sin una mayor participación de los países en desarrollo en la dirección del FMI y del Banco Mundial, no habrá un cambio efectivo”, añadió.

En opinión del presidente, esta desigualdad “resulta en efectos nefastos sobre el panorama político”. “Es injustificado mantener a Cuba en una lista unilateral de estados que supuestamente promueven el terrorismo e imponer medidas coercitivas unilaterales que penalizan indebidamente a las poblaciones más vulnerables”, comparó.

El presidente también dijo que es necesario escuchar a los “pueblos indígenas” sobre este tema. “No es más admisible pensar en soluciones para los bosques tropicales sin escuchar a los pueblos indígenas, a las comunidades tradicionales y a todos aquellos que viven en ellos. Nuestra visión de desarrollo sostenible está basada en el potencial de la bioeconomía”.

En su discurso, Lula afirmó que los países del sur global necesitan tener más representación en las Naciones Unidas. “En la fundación de la ONU, éramos 51 países. Hoy somos 193. Varias naciones, principalmente en el continente africano, estaban bajo dominio colonial y no tuvieron voz sobre sus objetivos y funcionamiento. No existe equilibrio de género en el ejercicio de las funciones más altas. El cargo de Secretario General jamás ha sido ocupado por una mujer. Estamos llegando al final del primer cuarto del siglo XXI con unas Naciones Unidas cada vez más vacías y paralizadas. Es hora de reaccionar con vigor ante esta situación, devolviendo a la Organización las prerrogativas que se derivan de su condición de foro universal.”